La última vez que Vinícius visitó el estadio de Mestalla, en Valencia, recibió una expulsión y este viernes vio otra tarjeta roja. En aquella ocasión el delantero del Real Madrid fue víctima de insultos racistas, situación que se volvió a repetir luego de que le gritaran “mono”, aunado a que los aficionados le dijeron en tono de burla: “Balón de Playa”.

Tal cántico fue una respuesta a que Vinícius quedó en segundo lugar en las votaciones del Balón de Oro, mismo que fue otorgado para Rodri, mediocampista del Manchester City. Además, la gente llegó a Mestalla con cartulinas con la cara del brasileño en donde también se veía una pelota de colores, en clara alusión a que se trataba de una de playa.

EL brasileño fue expulsado por segunda ocasión en el balompié profesional, de nuevo en Mestalla ante el Valencia, tras responder a un gesto del portero macedonio Stole Dimitrievski con un golpe en el cuello, que el árbitro César Soto Grado interpretó como agresión. Tras recibir la roja, quiso encarar al árbitro y la afición le profirió gritos de “mono, mono”.

El delantero había protagonizado un partido con numerosas protestas al colegiado. En el primer tiempo pidió un penalti no señalado, en varias ocasiones demandó tarjeta a jugadores del Valencia por faltas y acabó siendo expulsado a los 79 minutos.

Tras fallar una ocasión de gol cuando el cuadro merengue perdía 1-0, al adelantarse en una acción defensiva de Dimitri Foulquier para salvar a los naranjeros, ‘Vini’ cayó al césped y fue recriminado por el portero rival, que le tocó la espalda para que se levantara. El delantero se paró enfadado y golpeó el cuello de Dimitrievski, que se dejó caer.