POR: ALEJANDRO ROMERO BARRIOS
Después de los festejos del triunfo electoral de MORENA, inexorablemente vienen las evaluaciones sobre cómo está gobernando la presidenta Claudia Sheinbaum, que además, sirven de termómetro para medir cómo será la nueva gestión pública federal, más allá de la “tradicional” narrativa presidencial, los hechos y sus decisiones ya está en centro del escrutinio público.
El primer corte de caja es a los primeros 30 días de su mandato, para muchos un lapso de tiempo suficiente para visualizar con claridad el rumbo que tomará el nuevo gobierno, para analizar por dónde se empezarán a vislubrar los caminos que resolveran los enormes desafíos nacionales e internacionales que México enfrenta en materia económica, de salud pública, seguridad, migración y crimer organizado.
Cabe destacar que el gobierno de la presidenta Sheinbaum han generado expectativas positivas, por ser una mujer, científica, por su impulso de políticas gubernamentales que se inclinan por las energías renovables, la creación de nuevas secretarías e impulsar temas de género.
Además, de anunciar la construcción de obras públicas, reformas y en proceso con el cumplimiento de compromisos prometidos.
También ha iniciado su gestión con el envío de iniciativas, la más controversial, las leyes secundarias de la reforma judicial y las que buscan hacer realidad la paridad sustantiva.
Lo negativo, tiene que ver principalmente con las estrategias en materia de seguridad pública que el actual gobierno de la República no ha podido atenuar, por el contrario, ha mantenido la política del anterior gobierno que observando los resultados, fue un fracaso. Por ejemplo, hoy en México se han registrado más de 2,200 homicidios dolosos desde el primer día de la nueva gestión federal.
Este sin duda, se convierte en el desafío más importante a vencer: La violencia, que aqueja a gran parte del país.
Cabe destacar, que a pesar de que no se conoce las cifras exactas de homicidios en el primer mes de la presidenta Sheinbaum, porque el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP) hace público los datos oficiales los días 20 de cada mes. Pero, con base a datos del informe diario de seguridad, el mes de octubre cerró con un promedio de 74.1 homicidios diarios.
A los primeros días de iniciar su gestión, la mandata-ria Sheinbaum presentó, el 8 de octubre, su estrategia para contener la violencia, apoyada en la atención a las causas, consolidación de la Guardia Nacional, fortalecimiento de la inteligencia e investigación y coordinación con las entidades federativas.
Además, Omar García Harfuch, su secretario de Seguridad Pública, ha visitado algunos estados que han presentado conflictos por la inseguridad, como Sinaloa y Guanajuato, con el objetivo de buscar el estrategias para lograr la necesaria coordinación para buscar la pacificación regional y nacional.
Sheinbaum, no dio tiempos ni metas, pero aseguró que su estrategia dará resultados, aunque destacó que éstos no llegarán de un día a otro.
Así, el 28 de octubre de este año, la presidenta de México mencionó que “hay una estrategia de seguridad que va a dar resultados. Como lo he planteado, no es de un día a otro”.
Aunque los focos rojos están encedidos por la violencia en entidades como Chiapas, Michoacán, Guerrero, Guanajuato y Sinaloa debemos aclarar que no iniciaron con el gobierno de Sheinbaum. La herencia “maldita” viene del sexenio pasado, periodo que es considerado el más violento de la historia de México, con cerca de 200,000 femenicidios y homicidios.
Este escenario, ha obligado al gobierno de la República a presentar planes y programas como la implementación de su estrategia de seguridad, que desde su perspectiva busca fortalecer la inteligencia policial, el proyecto social de construir un millón de viviendas y el inicio de rutas nuevas de trenes de pasajeros.
A pesar de los buenos deseos del gobierno federal, se advierte que el dar continuidad a la estrategia obradorista de seguridad pública, será difícil conseguir la reducción de la violencia.
Está claro que el nivel de complejidad que ha implicado la seguridad pública para la gobernanza nacional, por ello, este gobierno debe tomar como eje rector de la nueva administración: La consolidación de la seguridad pública en todo el país.
Pero ello, este no es un tema nuevo, por ejemplo, los mandatarios que precedieron a la presidenta Sheinbaum, Calderón-Peña-Obrador, no pudieron resolver este tema de singular importancia nacional. Así, los mexicanos esperan resultados más que la cotidiana retórica gubernamental. Que las cifras de buenos resultados hablen por sí solas.
Finalmente y para ir cerrando, es importante reconocer, que el gobierno de la presidenta She-inbaum también heredó un par de crisis de la administración de Lópezobradorista, que no le correspondían, pero que ella está asumiendo cabalmente y, ya le están impactando en su gestión:
1.- Los enfrentamientos en el estado norteño de Sinaloa por la detención de “El Mayo” Zambada y,
2.- La confrontación del Poder Ejecutivo contra el Poder Judicial, por la implementación de la Reforma que busca renovarlo y que ha resultado de una enorme complejidad.
Temas que han empezado a minar un poco al nuevo gobierno, en su prestigio y reputación, sobre todo, en su libertad operativa. Lo único bueno es que tiene aún tiempo por delante para fortalecerse.
Todo con el objetivo, que la “luna de miel” de la presidenta Claudia Sheinbaum con el pueblo de México perdure.
Ya lo veremos. La “luna de miel” depende de los resultados, porque México ya no quiere gobiernos que den prioridad a la forma y no al fondo, México quiere resultados ya.
OTROS DATOS
Ahora Queretaro se suma a la ola de violencia nacional, en un ataque armado sin precedentes en un bar, 10 muertos y 13 heridos.
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